Bicho que ya es casi de la familia, por el raye que siempre tuvimos Marga y yo con Tolkien, (que pasamos con los genes a las generaciones siguientes), y por vaya a saber uno qué cosa que tienen esos animales no tan animales, terriblemente bestiales y, a la vez, dueños de procederes, virtudes y defectos inquietantemente humanos. Los he dibujado cada tanto, y he modelado uno o dos que deben andar dando pena por ahí
Vientoencontra como siempre, una vez se me dió por dibujar uno preguntando de dónde había salido eso de que todos eran malos y salvajes (todavía no se soñaba con filmar La Historia Sin Fin), y pergené este -rojo, como a mí me gustan- que con su actitud de perro vago y poco guardián compensó, en su simpatía, su incorrecta anatomía
"CUIDADO CON EL DRAGÓN"
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